Quisiera decir que hoy es una tarde lluviosa, y que aquél frío bajo cero, otorga planicies de recuerdos y algunos islotes de hielo, para morir congelado sin recordarte cada vez que intento dormitar.
Yo, a veces -cuando Dios se aleja de los hombres por su propio llanto y descubre otros soles en los ojos de un bebé- me siento a pensar cuando camino y avanzo lento hasta detenerme, para concluir que no reconozco este sitio, porque haces falta tú, quién suple todo el espacio vacío de la inmensidad o la nada.
Un amor... un amor en tono de gitanos, y zapateos de nostalgia.
Un amor, en un día como este, tan soleado... lleno de esplendor por doquier y ausente de la lluvia que a cántaros invade mi alma en silencio...
Un amor lejano, frente de mí... inalcanzable.
Un amor, que camina dándome la espalda, hasta dejarme morir en el calor de verano,
y la hipotermia de nuestro fin.
lunes, 19 de octubre de 2009
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Gracias, enhorabuena.